A poco más de
una hora de navegación desde Mallorca, el Archipiélago
de Cabrera constituye el mejor exponente de ecosistemas
insulares no alterados del Mediterráneo español. Desde
1991, el Parque Nacional Marítimo Terrestre cobija toda
la riqueza natural de este conjunto de islas e islotes
calcáreos: importantes colonias de aves marinas,
especies endémicas y uno de los fondos marinos mejor
conservados de nuestro
litoral.
Norma y fecha de
declaración: Ley 14/91, de 29 de
abril.
Desarrollo normativo:
Plan Rector de Uso y Gestión (Real Decreto
277/95, de 24 de febrero).
Localización geográfica:
Sito en la Comunidad Autónoma de Baleares, al
sur de la isla de Mallorca, el Parque Nacional engloba
el Archipiélago de Cabrera y su entorno marino, entre
los siguientes puntos geográficos: 39º 13’ 30’’ N2º
58’ E; 39º 13’ 30’’ N3º E; 39º 6’ 30’’ N3º E; 39º 6’
30’’ N2º 53’ 30’’ E; 39º 10’ N2º 53’ 30’’E
Superficie del Parque:
10.021 hectáreas (8.703 marítimas y 1.318
terrestres), pertenecientes al municipio de Palma de
Mallorca.
.Valores
culturales: Castillo del siglo XIV, declarado
monumento histórico-artístico. Conjunto de yacimientos
arqueológicos terrestres y subacuáticos
Altitud máxima: 172
m s. n. m.
Altitud mínima: 0 m
s. n. m.
Profundidad máxima del fondo
marino: 118
m.
En este Parque ,
predominan los arbustos leñosos de hoja coriácea y
pequeña, formadores de la garriga, matorral
perfectamente adaptado a los rigores del clima
mediterráneo, existen varios endemismos: astrágalo de las Baleares
(Astragalus balearicus), rubia
(Rubia angustifolia ssp. cespitosa),
tragamoscas (Dracunculus
muscivorum), hipericón balear
(Hypericum balearicum), etc. Constituye
un importante punto de escala en la ruta migratoria de
más de 150 especies de aves, tanto en el paso primaveral
como en el otoñal. Son vecinas de las islas desde la
gaviota de Audouin (Larus
audouini) hasta el halcon de Eleonora (Falco eleonorae). Los
fondos marinos también representan una parte muy
importante del Parque, con más de 200 especies de peces
y numerosos invertebrados endémicos